Banco de Hielo Integrado
¿Qué es y cómo funciona?
TurboPack puede incorporar un sistema de acumulación térmica por banco de hielo, formado por placas generadoras en circuito cerrado, que acumulan frío durante la noche, cuando la electricidad es más barata y el ambiente más frío, y lo liberan durante el día.
El hielo acumulado se utiliza estratégicamente para subenfriar el CO₂ condensado antes de su expansión o entrada en el evaporador. Este subenfriamiento mejora el comportamiento global del sistema y aporta múltiples beneficios técnicos y operativos.
¿Por qué subenfriar el CO₂ es una gran ventaja?
Aumento de la capacidad frigorífica efectiva: al subenfriar el líquido de CO₂, se incrementa el salto entálpico disponible en el evaporador, lo que significa más frío útil por cada kilo de refrigerante.
Reducción del caudal másico necesario, lo que reduce el esfuerzo sobre el compresor y las válvulas.
Estabilidad térmica en la alimentación de evaporadores: el banco de hielo puede entregar CO₂ líquido a 0 °C constantes, incluso en condiciones variables de carga o ambiente.
Mejor funcionamiento de las válvulas de expansión: al mantener una temperatura de entrada estable, las válvulas operan en un régimen más controlado, sin saltos ni oscilaciones, lo que mejora la estabilidad del sistema y el control de la superheat.
En definitiva, mejora el COP global del sistema y permite aprovechar al máximo cada vatio de energía eléctrica invertido.
Ventajas adicionales del banco de hielo
Reduce la potencia eléctrica contratada, desplazando parte del consumo a horarios nocturnos con menor tarifa.
Evita picos de consumo, que suelen ser penalizados en la factura eléctrica.
Optimiza el uso de los equipos principales (compresores, condensadores), que trabajan más descargados durante el día.
Estabiliza el sistema en momentos críticos, como el arranque del día o cuando coinciden varias cargas térmicas.
Es totalmente compatible con energías renovables, como la fotovoltaica, pudiendo cargarse de día con excedente solar y descargarse por la noche o al amanecer.
¿Por qué es la mejor solución ahora y en el futuro?
Porque en un contexto en el que el precio de la electricidad es volátil, las curvas de demanda son más pronunciadas y las exigencias regulatorias aumentan, el banco de hielo representa una ventaja estructural.
No es solo una mejora técnica. Es una decisión estratégica que convierte el sistema en una herramienta de gestión energética avanzada:
reduce costes, mejora la eficiencia y aporta flexibilidad operativa.
El banco de hielo de TurboPack no solo enfría. Equilibra, regula y transforma tu instalación.
